El Barcelona dejó escapar la victoria en una gran oportunidad para los azulgranas. Se adelantaron por dos ocasiones a través de Ibrahimovic, que se resarció de la mala suerte que arrastra con el Barcelona. Últimamente marca en momentos decisivos y así fue. La salida de Walcott revolucionó el partido en la segunda mitad para abrir el marcador a favor del Arsenal y dar velocidad. Posteriormente, Cesc Fábregas, obstruido en el área, transformó el penalti. No es como se empieza, sino como se acaba.
El Barcelona arrancó enchufado, muy motivado y con ganas de morder al rival. La presión del Barcelona le ponía en serios aprietos la condución del balón por parte del Arsenal. Messi se dejaba destacar en los primeros minutos con sus internadas y desbordes cerca del área y avisaba.
Ibrahimovic, que siempre aparece tarde en los partidos, y cuestionado por su mal rendimiento, tuvo en sus pies varias ocasiones. Una, se fue alto dentro del área, aunque en posición de fuera de juego. La mejor ocasión a pase de Messi en el área lo atajó Almunia y los rechaces volvieron a jugadores azulgranas. Al final, cuatro manos providenciales de Almunia desbarataron el gol del Barcelona.
Una estampida azulgrana se instalaba en el Emirates Stadium. El Arsenal, adormecido, no veía el área rival, y los defensas desvanecían el ataque con pases largos, que no iban a ningún lado. Bendtner, muy solitario en la delantera, apenas participaba del ataque del Arsenal.
Durante los primeros 20 minutos, el dominio era evidente a favor del Barcelona. A partir de ahi, se empezó a equilibrar la balanza. Sagna conducía por la derecha el peligro, pero sus centros no encontraban rematador. Por su parte, Nasri, veloz y muy dinámico en la primera mitad, se erigió en protagonista de su equipo. Tuvo una gran ocasión en el primer período. Un remate desde el pico del área izquierdo, que se fue rozando el palo izquierdo.
El Arsenal se crecía, ayudado por el ambiente espléndido que se podía apreciar en las gradas. El animo de los aficionados enorgullecía al Arsenal.
Un centro de Nasri envenenado al centro del área posibilitó la gran ocasión. Erró al despejar Álves, y Bendtner sólo ante Valdés falló. Espectacular parada del meta azulgrana. Está demostrando que merece estar en la Selección Española. Arshavin y Gallas tuvieron que marcharse con problemas para dar salida a Eboue y Denilson.
Llegamos al descanso con una clara diferencia. Muy buen planteamiento del Barcelona: presión y dominio del balón. Ese dominio que necesita el Arsenal, ya que ambos equipos les gusta tener el balón para poder disfrutar de las máximas ocasiones posibles. Valdés no trabajó mucho, a diferencia de Almunia que atajó continuamente la estampida azulgrana. Xavi se hizo con el balón y se combinó con sus jugadores a la perfección.
Reanudado el descanso, el Barcelona seguía en su línea. Y así fue. Nada más comenzar la segunda parte, Ibrahimovic adelantó al Barcelona. Una gran vaselina ante una salida innecesaria de Almunia. El que la sigue, la consigue. Toda la primera mitad para marcar, pero ahora se hizo justicia.
El susto llegó a Londres. Avisaba tanto el Barcelona que cuando llegó no se lo podían creer. Después del gol, el Barcelona empezó a bajar el ritmo y el Arsenal tocaba el balón con más criterio.
Aún así, un pase preciso de Xavi a Ibrahimovic a la espalda de la defensa provocó el segundo en el marcador. Ibrahimovic fusiló la meta defendida por Almunia. Esta vez, la puntería la tenía bien medida.
El Arsenal apretó en la recta final, no quería irse al Camp Nou con la eliminatoria ya decidida. El Barcelona se relajó y las combinaciones entre los jugadores no salían. El ténico francés, Wenger, decidió agotar los cambios. Sacó a Walcott por Sagna. La frescura, rapidez y velocidad en acción.
El mismo Walcott sorprendió a los presentes para abrir el marcador. Le ganó la espalda a Maxwell y tras controlar el balón dentro del área le ha batido por bajo con un disparo cruzado a Valdés.
El Barcelona se desinfló, no provocaba ocasiones, el planteamiento de partido cambió de rumbo. Ahora, el Arsenal dominaba con claridad y presionaba a los centrocampistas. El problema del Barcelona es que su ataque se basa en la coordinación de Xavi y Busquets.
“Tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe”. Ese dicho español reflejó el final del partido. El Arsenal arrimaba el área rival. Piqué recibió la tarjeta amarilla por obstruir a Cesc y no podrá jugar la vuelta. Valdés se tuvo que ejercitar con profundidad y salvó algunas oportunidades.
A falta de 7 minutos para el final, se produjo un penalti a favor del Arsenal. Puyol le dio en la pierna a Cesc, que originó la expulsión del central, y el capital del Arsenal fue el encargado de transformarlo. Batió por el centro el medio a Valdés.
El catalán se resintió de la lesión y acabó el partido como pudo. El partido se rompió y ambos equipos vieron la portería por la vía rápida. El Barcelona desaprovechó una ocasión de oro para sellar el pase a semifinales, pero no pudo materializar la victoria. Piqué, Puyol y Cesc no estarán en el choque de vuelta, cuando se jugarán el pase.
El Barcelona arrancó enchufado, muy motivado y con ganas de morder al rival. La presión del Barcelona le ponía en serios aprietos la condución del balón por parte del Arsenal. Messi se dejaba destacar en los primeros minutos con sus internadas y desbordes cerca del área y avisaba.
Ibrahimovic, que siempre aparece tarde en los partidos, y cuestionado por su mal rendimiento, tuvo en sus pies varias ocasiones. Una, se fue alto dentro del área, aunque en posición de fuera de juego. La mejor ocasión a pase de Messi en el área lo atajó Almunia y los rechaces volvieron a jugadores azulgranas. Al final, cuatro manos providenciales de Almunia desbarataron el gol del Barcelona.
Una estampida azulgrana se instalaba en el Emirates Stadium. El Arsenal, adormecido, no veía el área rival, y los defensas desvanecían el ataque con pases largos, que no iban a ningún lado. Bendtner, muy solitario en la delantera, apenas participaba del ataque del Arsenal.
Durante los primeros 20 minutos, el dominio era evidente a favor del Barcelona. A partir de ahi, se empezó a equilibrar la balanza. Sagna conducía por la derecha el peligro, pero sus centros no encontraban rematador. Por su parte, Nasri, veloz y muy dinámico en la primera mitad, se erigió en protagonista de su equipo. Tuvo una gran ocasión en el primer período. Un remate desde el pico del área izquierdo, que se fue rozando el palo izquierdo.
El Arsenal se crecía, ayudado por el ambiente espléndido que se podía apreciar en las gradas. El animo de los aficionados enorgullecía al Arsenal.
Un centro de Nasri envenenado al centro del área posibilitó la gran ocasión. Erró al despejar Álves, y Bendtner sólo ante Valdés falló. Espectacular parada del meta azulgrana. Está demostrando que merece estar en la Selección Española. Arshavin y Gallas tuvieron que marcharse con problemas para dar salida a Eboue y Denilson.
Llegamos al descanso con una clara diferencia. Muy buen planteamiento del Barcelona: presión y dominio del balón. Ese dominio que necesita el Arsenal, ya que ambos equipos les gusta tener el balón para poder disfrutar de las máximas ocasiones posibles. Valdés no trabajó mucho, a diferencia de Almunia que atajó continuamente la estampida azulgrana. Xavi se hizo con el balón y se combinó con sus jugadores a la perfección.
Reanudado el descanso, el Barcelona seguía en su línea. Y así fue. Nada más comenzar la segunda parte, Ibrahimovic adelantó al Barcelona. Una gran vaselina ante una salida innecesaria de Almunia. El que la sigue, la consigue. Toda la primera mitad para marcar, pero ahora se hizo justicia.
El susto llegó a Londres. Avisaba tanto el Barcelona que cuando llegó no se lo podían creer. Después del gol, el Barcelona empezó a bajar el ritmo y el Arsenal tocaba el balón con más criterio.
Aún así, un pase preciso de Xavi a Ibrahimovic a la espalda de la defensa provocó el segundo en el marcador. Ibrahimovic fusiló la meta defendida por Almunia. Esta vez, la puntería la tenía bien medida.
El Arsenal apretó en la recta final, no quería irse al Camp Nou con la eliminatoria ya decidida. El Barcelona se relajó y las combinaciones entre los jugadores no salían. El ténico francés, Wenger, decidió agotar los cambios. Sacó a Walcott por Sagna. La frescura, rapidez y velocidad en acción.
El mismo Walcott sorprendió a los presentes para abrir el marcador. Le ganó la espalda a Maxwell y tras controlar el balón dentro del área le ha batido por bajo con un disparo cruzado a Valdés.
El Barcelona se desinfló, no provocaba ocasiones, el planteamiento de partido cambió de rumbo. Ahora, el Arsenal dominaba con claridad y presionaba a los centrocampistas. El problema del Barcelona es que su ataque se basa en la coordinación de Xavi y Busquets.
“Tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe”. Ese dicho español reflejó el final del partido. El Arsenal arrimaba el área rival. Piqué recibió la tarjeta amarilla por obstruir a Cesc y no podrá jugar la vuelta. Valdés se tuvo que ejercitar con profundidad y salvó algunas oportunidades.
A falta de 7 minutos para el final, se produjo un penalti a favor del Arsenal. Puyol le dio en la pierna a Cesc, que originó la expulsión del central, y el capital del Arsenal fue el encargado de transformarlo. Batió por el centro el medio a Valdés.
El catalán se resintió de la lesión y acabó el partido como pudo. El partido se rompió y ambos equipos vieron la portería por la vía rápida. El Barcelona desaprovechó una ocasión de oro para sellar el pase a semifinales, pero no pudo materializar la victoria. Piqué, Puyol y Cesc no estarán en el choque de vuelta, cuando se jugarán el pase.
*Artículo publicado en todofutbol.cl
Foto: elnuevoherald.com
Firmado: Iñigo Gómez
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