lunes, 13 de diciembre de 2010

Premier League resumen week 17

Por Alex Barbero


En Inglaterra todo sigue igual. El Manchester United recupera el liderato tras su victoria ante un buen Arsenal, el Chelsea continúa con su particular suicidio que le aleja poco a poco de la cabeza de la tabla, y el vecino rico de los Red Devils, el City dando guerra, opositando al trono de rey en la Premier

El mejor partido de la jornada se saldó con victoria local. El Manchester United venció a un Arsenal derrotado, que dio varias facilidades defensivas y que mostró carencias notables a la hora de llevar el juego ofensivo. El Manchester reposado en Nani y en una buena solidez táctica se llevó os tres puntos justamente. Así, el equipo de Ferguson recuperó la primera plaza.

La clasificación sigue apretada por arriba. No vale relajarse ya que en cualquier pichazo supondría dar ventaja a un rival directo. Era impensable que tantos equipos llegarán tan bien a las vísperas de las navidades. El proyecto del City funciona, Ferguson consigue no perder, el Arsenal resiste las acometidas de los grandes, el Chelsea ha dado un serio bajón, pero su distancia con los de arriba no se ha visto mermada en exceso. El Tottenham a la espera de que le dejen formar parte del grupo selecto de aspirantes a levantar el título.

Más abajo, Bolton sigue sumando y acechando peligrosamente, en silencio a los equipos de arriba. Consigue afianzase en puestos de Europa League e intentará sorprender a todos luchando por una plaza en la Champions. Tarea muy complicada viendo la competitividad que están mostrando los grandes de las islas británicas. Sobretodo el City, que se podría ver perjudicado en enero si finalemente la rebeldía de Tévez da resultado y El Apache abandona la disciplina citizen.

En las posiciones peligrosas, la clasificación se estira y ya va habiendo un hueco considerable. El West Ham se hunde y no parece tener un salvavidas apropiado. Mientrasm una franja de cinco equipos querrán esquivar la zona gélida con una victoria la semana que viene. El Aston Villa, cuya temporada está siendo paupérrima, respirará por lo menos hasta dentro de dos semanas.

Se acercan las navidades y va siendo hora de evaluar quien debe comerse el turrón, quien debe estar tranquilo en Nochebuena, quien tiene derecho a celebrar el fin de año, que jugadores podrían ser los regalos de reyes o simplemente alguno que se merezca carbón. La Premier seguirá deparándonos emoción e intensidad hasta que termine la temporada. Un lujo poder disfrutar de una competición cuya rivalidad va más allá de dos equipos.

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