La Liga siguió su curso, los dos grandes ganaron, y siguen distanciados por siete puntos. El Barça ganó a un mal Atlético de Madrid, mientras que el Real Madrid se impuso en un partidazo ante la Real Sociedad. También la lucha por el pichichi cada jornada que pasa es más apasionada. Messi con tres goles, y Cristiano Ronaldo con dos quedan empatados en la cabeza de la tabla.
El Barça sigue siendo un rodillo imparable, y le bastaron 45 minutos de buen fútbol para doblegar a un Atlético de Madrid en caída libre. Los colchoneros que siempre han puesto en apuros al club azulgrana, cuajaron uno de sus peores partidos. Leo Messi fue el gran protagonista del encuentro al marcar los tres goles, y hacer que el Barça esté en una racha de 16 partidos seguidos ganados, en la que han hecho 60 goles, y sólo han encajado seis. Algo realmente increible, e impensable cuando empezó la Liga.
Guardiola sacó la mejor alineación posible, con la baja de Puyol. Abidal está cuajando su mejor temporada, y fue uno de los destacados, es un seguro en defensa, e incluso tira a puerta, estamos sin ninguna duda ante uno de los mejores laterales izquierdos del mundo.
El Atleti comenzó con Forlán en el banquillo, y con el canterano azulgrana Fran Mérida como titular. Forlán no está atravesando una buena racha, y previendo el potencial ofensivo del Barça, Quique optó por tener más la posesión del balón. Equivocado o no, Quique deshizo este cambio en el descanso, y tras el descanso fueron los mejores minutos de los colchoneros. El Kun tuvo alguna ocasión para intentar remontar el partido, y acercarse a los locales, pero no pudo hacer nada. Piqué incluso salvó un gol cantado con un despeje de cabeza en la línea de gol.
Cuando Messi hizo el tercero se acabo la historia, ya que si los rojiblancos tenían alguna oportunidad con el 2-0, con un tercer gol se les acababan las posibilidades, ya que nadie ha conseguido remontar un 3-0 a este Barça, y menos en esta campaña. El Barça se enfrentará la próxima jornada ante un Sporting de Gijón que está en racha, y jugando a buen nivel.
En el Bernabeu ayer se vio un partido a los que la parroquia blanca no está acostumbrada. Una alineación distinta con Garay y Kaká como titulares, Mou hizo jugar al fútbol a su equipo, recordando en algunas fases del encuentro al mejor Barça. Kakáa parece haber renacido, y la cesión de Emmanuel Adebayor le da mucha más presión al rival.
Metieron cuatro, pero pudieron ser muchos más. Cristiano hizo un doblete para celebrar su 26 cumpleaños. Ozil y Kakña demostraron que pueden jugar juntos, y darle al Madrid otra pinta mucho mejor, y otro estilo con el que perderán muy pocos partidos, e incluso se divertirán, algo a lo que últimamente no estaban acostumbrados. El Madrid no se rinde, y estará ahí toda la temporada para esperar un fallo del Barça que le pueda acercar a ese liderato, que a día de hoy está muy difícil.
De los jugadores realistas ni Griezzman, ni Xabi Prieto realizaron su mejor partido, pero si uno de los ídolos del público merengue: Raúl Tamudo, que ayer fue titular, y estuvo a punto de amargarles la noche. Casillas hizo dos intervenciones clave que dieron alas al Madrid, ayer demostraron de lo que realmente son capaces, y de que no vana regalar nada. Una lucha que promete ser apasionante, y en los dos suelos entre los grandes va a ser una semana con un espectáculo de otro planeta.
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