España frente a su gran reto

Por Pablo Vega.

En este blog, no hemos escatimado elogios y para bienes para la selección española de fútbol. No lo hemos hecho desde el convencimiento inducido por unos medios de comunicación o por el ambiente optimista que muchos españoles poseen. Consideramos a España favorita por sus méritos como equipo en los dos últimos años, por la calidad de sus individualidades, por su atractivo estilo de juego y, sobre todo, porque la Eurocopa nos enseñó que sabe competir.

No sólo pensamos que los 23 jugadores elegidos para Sudáfrica son lo mejor que tenemos ahora mismo sino que nos cuesta encontrar pegas a un conjunto que, incluso jugando mal ( como el sábado pasado frente a Arabia Saudí ) acaba ganando los partidos por inercia y por chispazos individuales de sus futbolistas. No somo optimistas basados en la fe absoluta hacia nadie ya que, como bien decía nuestro compañero Jurdan Arretxe, es imposible que se repitan las mismas circunstancias que hace dos años.

Sin embargo, pensamos que si la totalidad de las casas de apuestas y las opiniones de los "entendidos" de fútbol van en la misma dirección, algo de verdad habrá detrás de tanto elogio desmesurado y críticas inaudibles. También, en estos momentos tan complicados, muchos se agarran al fútbol como tabla de salvación: no es nuestro caso, pero que duda cabe que la selección española es una de las pocas razones para encender la tele este verano.

No subvalorar a los rivales debe ser una constante positiva para evitar un fiasco superior: España se mantiene virgen en un Mundial más allá de unas semifinales muy lejanas en el tiempo ( Brasil 1950 ) y la historia nos dice que la barrera natural son los cuartos. Esto es un hecho tan diáfano como que Alemania, Italia, Brasil o Argentina pueden estar bien o mal, pero siempre son lo suficientemente competitivas como para echarnos en una mala tarde.

Por lo demás, el grupo H no parece encerrar grandes peligros para la selección española. Los suizos llegan con la etiqueta de ser un buen equipo pero excesivamente blando en las grandes citas que le impiden llegar más lejos. Aun así, cuenta con buenos jugadores como Senderos, Frei o Barnetta, entrenados además por todo un clásico de los banquillos como Ottmar Hitzfeld.

Siendo los hondureños el rival presumiblemente más débil, queda Chile como la selección que más problemas puede plantear a España.

Los de Bielsa son un conjunto sólido y rocoso, que quedó segundo de su grupo de clasificación sólo detrás de Brasil. Consiguieron ganar a selecciones como Uruguay o Argentina y actualmente ocupan el nº15 de la clasificación FIFA. No estaría de más seguirle la pista a un combinado que puede plantar al mismo Brasil en octavos con jugadores de primer nivel como el meta Claudio Bravo, Carmona, Matías Fernández, Mark González o el artillero Suazo ( al que el Zaragoza le debe prácticamente la permanencia ).