El Barça vuelve a decepcionar y empata ante un Mallorca en horas bajas. Los de Guardiola realizaron un partido con dos caras: excelente primera mitad, pero humillante segunda parte. El mejor del partido fue Mascherano, que de principio a fin realizó un gran encuentro, aunque no se puede decir lo mismo de sus compañeros especialmente los defensas.
Ya lo avisaba Cruyff hace algunos días, este Barça tiene que matar los partidos, y lo que ha ocurrido esta tarde en el Camp Nou no es fruto de la casualidad. El Barça tiene que corregir muchos errores, la falta de gol es evidente, pero hoy se han añadido claros desajustes defensivos.
Guardiola tenía varias bajas para jugar contra el Mallorca, dos de ellas vitales como eran la de Xavi y Villa. Y para colmo el técnico blaugrana dejó en el banquillo a dos campeones del Mundo como son Puyol y Busquets.
Nada más comenzar el encuentro el Barça parecía muy ordenado, y salió a por el partido. Las primeras ocasiones de la primera parte corrieron a cargo de los tres delanteros en el día de hoy: Messi, Bojan y Pedro, incluos el lateral izquierdo Abidal pudo hacer el primer gol de su carrera. Piqué como de costumbre muy centrado en ataque, y ofreciéndose en muchas de las jugadas, dando alternativas al juego.
Todo iba bien, el primer gol lo anotó Messi a pase de Pedro, un disparo desde fuera del área se metió en la portería del portero israelí Aouate. Tras esto el Barça siguió buscando un segundo gol que nunca llegó.
El Mallorca no podía ni salir a la contra ante el abrumador juego del Barça, pero casi al borde del descanso, el Mallorca tuvo una clara ocasión que Valdés desvió a córner. El primero para el equipo bermellón. Así llegó el gol, córner sacado por De Guzmán que cabecea Nsue para establecer la igualada en el marcador. El resultado no variaría hasta el final del encuentro.
Pero como decíamos el barça tenía dos caras, un empate que parecía hasta el momento milagroso para el Mallorca les dio alas. Un Mallorca mucho más enchufado, y con muchas más ganas de salir a por la victoria, mientras que el Barça parecía que no podía pocas ocasiones, y mucha tranquilidad como si estuvieran convencidos de ganar el encuentro.
Andando no se ganan encuentros, hay que luchar, el Mallorca pudo hacer un gol en varias jugadas, mientras que el Barça era incapaz de realizar si quiera una ocasión. Muchos despistes defensivos, y el Barça continuó jugando, aunque esta vez mucho más por el centro que por las bandas como en la primera mitad.
Guardiola buscaba soluciones y los dos primeros cambios fueron: Thiago por Keita, y Nolito por Pedro que se había lesionado. Thiago dio mucha más movilidad al balón en el centro del campo, y velocidad algo que el Barça necesitaba urgentemente. La desafortunada lesión de Pedro, que hizo una segunda parte horrible, hizo que debutara Nolito, una de las revelaciones del Barça B. Dio más alternativas en ataque con un juego mucho más participativo y más oportunidades.
En los córner el Mallorca continuaba haciendo mucho daño, y seguía creando claras ocasiones. Guardiola decidió ir a por el partido y cambió a Milito por Jeffren, un cambio totalmente ilógico, y sin sentido puesto que Piqué estaba cansadísimo, y sus continuas subidas hacían presagiar un mal desenlace para el equipo azulgrana.
El segundo gol del Mallorca no llegó, y Guardiola tiene dos semanas para pensar que debe hacer, y que cambiar. Una reacción que debe llegar a tiempo para continuar luchando por todos los títulos. Y con las desafortunadas lesiones, y la justa sanción de Villa se ha visto que este equipo tiene una plantilla demasiado corta.
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