jueves, 17 de marzo de 2011

Adios a la maldición de octavos

Por Nilo Trugeda



El Madrid paso de su maldición, y logró estar en los cuartos de final de la Liga de Campeones tras siete años sin hacerlo, mañana acompañarán al Barça en un bombo que tiene mucho morbo con muchas posibilidades de viejos reencuentros, o venganzas. El Madrid se clasificó tras arrollar a su bestia negra el Olympique de Lyon.


El partido comenzó con un bonito detalle, el Real Madrid le envió su apoyo a uno de los jugadores del equipo rival: Eric Abidal un bonito detalle y más con la rivalidad entre los dos equipos, su apoyo ya lo habían demostrado otros jugadores como CR7 o Sergio Ramos vía Twitter. Gran detalle que demuestra que la vida de las personas está por encima de todo, y fue especialmente significativo seguramente para todos los culés.

Tres goles pero que debieron ser más, el Madrid empezó el partido yendo a marcar y a que se esfumaran los fantasmas del pasado. El primer tanto lo logró Marcelo que volvió a demostrar que es un killer del área. Si fallan los demás siempre es una buena opción para atacar, ya defendiendo es otra cosa.

La primera parte se fue con emoción al descanso, porque en el momento en que metiese un gol el Lyon igualaban la eliminatoria. Así que con cabeza el Madrid defendió el resultado, aunque eso no evitó que alguna que otra ocasión se creara. El Lyon hizo todo lo contrario que los últimos años, uno de sus peores partidos en el Bernabeu especialmente defendiendo con Revelliere y Chris. Fue un auténtico coladero, y lo único que les salvó de que el Madrid aumentara su cuenta, fueron algunas de las grandes ocasiones evitadas por Lloris.

Pepe vio una tarjeta amarilla muy pronto que le podría haber costado muy caro al Madrid, el portugués tiene que tener cuidado con las faltas que realiza y medir muy bien sus entradas, es de lo poco que a mi parecer le falta, por lo demás es un grandísimo jugador vital en el esquema de Mourinho.

La segunda parte más de lo mismo, aunque los franceses salieron a buscar más el gol, y el Madrid visto lo de los últimos años daba por bueno el encuentro. Pero cuando uno se encuentra ante un rival tan flojo y viendo lo de los últimos años contra los franceses, no queda otra que atacar. El equipo blanco marcó dos goles más uno del delantero francés Karim Benzema que volvió a demostrar estar en un gran estado de forma, y otro de Di María en el que le favoreció bastante la suerte.

Cristiano volvió a demostrar que en los partidos grandes siempre falla y nunca aparece, esto ya le pasaba en el Manchester United, y ahora en el Madrid. Quien sabe si el Luso se querrá esperar a la final de la Champions en Wembley para desmostrar que es uno de los grandes y que tampoco en las grandes ocasiones falla a su cita con el gol. Y para mi el Real Madrid demuestra ser un equipo sin Cristinao, con un equipo quiero decir que hay más movimiento de balón, más asociaciones entre los jugadores e intentan presionar mucho más al rival en su campo, aunque el "7" blanco también tiene sus virtudes que son muchísimas, no quiero tampoco desmerecer a uno de los grandes.

Así el equipo de Mourinho vuelve a estar a una con el público del coliseo blanco, todos a una tal y como pedía Jose Mourinho en la rueda de prensa previa al partido. A partir de aquí el camino será más fácil para el Madrid después de haberse sacado la espinita de los últimos seis años. Toca esperar que en el sorteo no les toque a los dos equipos españoles que ya podrían enfrentarse en cuartos, y que la suerte lo deje para la siguiente ronda o una hipotética final si las cosas fueran bien.

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