Por Nilo Trugeda
El Barça puso fin a su crisis endosándole cinco goles al Panathinaikos griego, un buen partido de los azulgranas que salieron enchufados desde el primer minuto. Guardiola alineó a su once de gala en una competición que vuelve a ser una ilusión para todo el barcelonismo por su final en Wembley, lugar donde el Barcelona ganó su primera copa de Europa en 1992, con Guardiola como jugador en aquel equipo.
En el primer tramo del encuentro el equipo blaugrana salió al ataque con todo lo que tenía, y Messi no tardó en realizar la primera ocasión, un cabezazo a pase de Pedro, que el guardameta despejó. Se vio un Barça muy diferente al del día del Hércules creando ocasiones, y movimiento en todas las líneas del equipo. Misteriosamente se empezó adelantando el equipo griego tras un veloz contraataque, que acabó con el gol del ex-jugador del Olympique de Lyon, Govou.
Tan sólo dos minutos después el Barça empataba el encuentro un gol de Messi a pase del gran Xavi Hernández, permitió establecer la igualada en el marcador. El partido estaba controlado, y los jugadores con calma a pesar del primer tanto del Panathinaikos.
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El asturiano marcaría el segundo de la noche tras un córner peinado por Sergio Busquets, pegó nada más llegarle el balón. Un fuerte disparo en el que Tzorvas no pudo hacer nada.
Las ocasiones sucedían para el equipo de Pep Guardiola, y Messi enviaba un balón al larguero, en el rechaze Dani Alves se encargaría de mandar el balón por encima de la portería griega. En el minuto 44 llegó el segundo tanto del argentino, una doble pared con Xavi y Pedro, acabó anotando.
El Barça llegó al decanso con 3-1 en el marcador, una ventaja que parecía insalvable para el Panathinaikos. En el segundo tiempo se vio un Barça mucho más tranquilo en ataque, pero con el control total del balón. Los azulgrana seguían creando ocasiones, y hasta Messi falló un claro penalty que hubiera supuesto un nuevo hat-trick en la Champions.
El Panathinaikos desquiciado por el buen juego desplegado por los de Guardiola, comenzaron a realizar faltas a todos los que tenían por delante. Iniesta se llevo unos cuantos golpes cuando el partido ya estaba casi decidido, y el árbitro parecía no castigar el juego duro.
En la segunda parte Guardiola puso en juego a Gabi Milito, Bojan y Mascherano, los cuales apenas participaron en el juego. Bojan se le vio con demasiada ansiedad por meter un gol. Mascherano en cambio se le vio muy seguro y parece que se adaptará fácilmente al estilo del filósofo.
Anotan Pedro y Alves
La fiesta azulgrana la completaron con goles Pedro y Alves. Pedro aprovechó un balón que le había sacado Tzorvas a Messi, y Dani Alves anotó en el tiempo de descuento un gol de cabeza. Acababa un buen encuentro con un resultado feliz para loa azulgrana después de la derrota ante el Hércules. Gran partido de Messi y Xavi, y por parte del Panathinaikos el portero Tzorvas hizo un gran trabajo que evitó una goleada aún más escandalosa. Esto tiene buena pinta, pero no ha hecho más que empezar.
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