La Real Sociedad ganó esta mañana al Nastic de Tarragona por un 1-0. No podía pasar por alto como se consiguió el gol. Nada menos, que por el guardameta realista Claudio Bravo, algo inusual en cuaquier partido de las ligas españolas o europeas.
Comenzó el partido, trabado en ambos conjuntos, sin saber quien dominaba en el campo. Poco a poco Aranburu iba imponiendo el orden en el campo, bien secundado por Elustondo, que no hizo mal partido. Griezman y Nsue daban señas de calidad por su respectivas bandas con centros, que aunque no ponían peligro a la defensa catalana, incomodaban y, cada vez, asediaban al meta rival.
Tras varias acometidas realistas, que no pudieron materializar ( casi todos los remates salían fuera de la portería), llegó el min. 44. Una falta cometida a Griezman tras una buena pared con Bueno a escasos metros del área frontal a la porteria, se encargó el guardameta Claudio Bravo de efectuarla. Con algo de fortuna, un potente disparo, que pegó entre las piernas del defensa Roberto, se encajó dentro de las mallas. Sería el 1-0. Hacia mucho que no veíamos un portero acercarse al área rival para ejecutar la falta. Sorprendió a los aficionados la valentía de este portero, que últimamente se encuentra en un gran nivel (ojeado por varios clubs de Primera), que hasta se atreve a marcar goles de falta.
Al reanudar el descanso, el encuentro se durmió y el Nastic empezó a provocar ocasiones, pero la zaga realista estaba bien plantada en el campo, y bloqueabas los embites del Nastic. La sustitución de Alex Cruz dió más rapidez y profundidad al equipo, pero N'Gal, delantero del Nastic, no parecía concentrado, al intentar por una y otra vez incomodar a la defensa de la Real. No era su día. Los remates no encontraban la portería y le robaban cada dos por tres la pelota.
La Real Sociedad, colocada atrás, reaccionaba en contraataque y asustó en continuas ocasiones. Un error claro de Mikel Aranburu, que solo ante la portería, remátó fuera. Pudo ser la sentencia del partido, lo que le permitió seguir vivo al Nastic e insistir hasta el último minuto para lograr, por lo menos, el empate. Dos minutos para el final, Nsue tuvo la mejor ocasión del encuentro.
La Real Sociedad sufrió en los últimos minutos, al perdonar varias oportunidades realistas. No fue así, consiguió la victoria, que iguala en puntos (47) al líder, el Hércules. Por su parte, Claudio Bravo se convirtió en el protagonista del encuentro; apesar del gol encajado, realizó una gran labor en su portería.
Foto: Marca
Firmado: Iñigo Gómez
1 comentario:
Ha tenido un poco de suerte en el gol, pero ha sido decisivo. De todos modos ¿no hay nadie en la Real mejor que su arquero para poder lanzar las faltas?
Un abrazo Iñigo!
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